Just another maniac friday

Hola mundo!!!! Por fin vuelvo a dar señales de vida, lamento la ausencia. Tenía un exámen muy difícil y unos cuantos tediosos trabajos importantes que realizar, así que practicamente toda la semana estuve ausente, unos cuántos me vieron sufrir en el twitter jejeje. Pero ya estoy de regreso, escribiendo y escribiendo, peleandome con la página de la Gandhi que me pone mal la dirección de mi envío ¬¬ y viendo cómo se acaba de soltar la lluvia.

Hoy les comparto un post que venía pensando desde hace días. Nada en especial, sólo una crónica de mi viernes...just another maniac friday.
Yo amo los viernes, porqué regreso a mi casa después de una semana de clases y tareas. Regresó con mi familia, a comer la deliciosa comida de mi mamá a jugar con mi perrito (qué acaba de ser papá por segunda vez wii) y a ver a mis amigos.
Pero también odio los viernes. Ahora sabrán por qué.
Cada viernes, al menos de este semestre esta es mi rutina:
Levantarme a las 7:30 (después de haberme dormido a la una o más tarde xD) ir a lavarme la cara, regresar y quedarme dormida otros quince minutos para que al final se me haga tarde arreglándome y terminé por irme sin desayunar.
Caminó dos cuadras para encontrarme con mi amiga Mary que siempre amablemente me espera para irnos a la escuela en su auto (y mañana es su cumple!! feliz día) llegamos a clase de economía, qué son dos horas pero ella no nos da ni una y media completa. Vamos a la cafetería a desayunar y pasar el rato. Tenemos clase de patología, donde la maestra nos canta melodías para hacernos caer en los brazos de morfeo, bueno no ella da su clase pero la verdad es que siempre me muero de sueño, tiene un tono de voz que dormiría a cualquiera.
Y ahora viene lo bueno, después de que nos deja salir como 2 minutos antes de las 2 viene la faena. Mi amiga me deja en la parada del camión como a eso de las 2:20. Espero el camión, llegó a la central compró mi boleto, abordo mi autobus (cargada con la mochila y la laptop)esperoooo a que salga. Y cuando me doy cuenta apensa estamos por salir de la ciudad y ya son las 3:30. Intentó leer, y en la tercer página el sueño me vence. Despierto y ya estamos en mi ciudad, son las 4:15. Bajó en una parada no oficial para no tardar (más) en llegar a casa. Espero mi (tercer) camión, subó me siento hasta el final, me colocó los audífonos y sacó de nuevo el libro y leo hasta que llegó a mi casa. Que ya son las 5:00 o más tarde.
Ya aquí todo es felicidad y esas tres horas desde mi salida de clases valen la pena.
¿Qué tal mi faena?
Bueno voy a hacer el post del autor del mes, solo quería compartir con ustedes mi rutina del viernes... pero qué bueno que ya es viernes!!! que tengan un bello fin de semana.