Capítulo 6
Primer día de clases… bueno no en realidad. Pero sí el primero después de mi semana de suspensión, y yo estaba igual de nerviosa que si fuera la primera vez que entraba por las puertas de la escuela.
Sentía las miradas de todos sobre mí, hasta trataba de pasar desapercibida, escondiéndome detrás de mi carpeta.
-Ay cálmate exagerada, nadie te esta viendo-dijo Jo
-Es cierto Carly, nadie te ve, por favor deja de taparte que si no entonces si te verán extraño.
Seguí su consejo confiando en que decían la verdad y seguí caminando, llegué a mi casillero
-Bueno hay algo que debemos decirte-dijo Erin mirando a Jo.
-Ah no, a mi no me metas, yo no tengo nada que ver.
-¿Qué pasa?
-Es que verás… tu chico cretino… comparte algunas de nuestra clases.
-¿Qué?-pregunte estupefacta- ¿qué clases?
-Bueno, sólo las que no compartimos con Jo.
-Pero con ella solo compartimos tres… ay no… no puede ser
-Lo lamento, tendrás que soportarlo en las cuatro que restan, empezando con esta.
Matemáticas, si en sí era una pesadilla, me preparaba para lo peor.
Entré en el salón, con los libros en la mano, me dirigí a mi lugar, pero alguien ya estaba sentado ahí.
-Disculpa?... ese es MI lugar-dije tratando de poner voz autoritaria
-No veo tu nombre en ninguna parte-contestó
-Por favor, solo quiero sentarme
-Pues busca un nuevo lugar
-Me he sentado aquí desde que empezó el ciclo, tu eres él que acaba de llegar
-Cierto, tan cierto cómo que tú no estabas y yo me he sentado aquí toda la semana pasada- no pude evitar mirar a Erin con enojo, ¿cómo había permitido esto?- yo no tengo la culpa de que te hayan despedido, tal vez si fueras menos grosera
-Grosera tu….
-Señorita Ainsworth, hay algún problema?- preguntó la Profesora Foss recién entrando al aula.
-Es sólo que ya no tengo asiento
-Eso no es problema, aquí hay uno al frente
Arrastré los pies por el pasillo, con las mandíbulas apretadas y me dejé caer tan fuerte que casi me hago daño.
Ni siquiera pude poner atención en la clase, estaba molesta. Pero decidí que Chris Stevens no me iba a arruinar el día por segunda, no, tercera vez, así que las clases que siguieron estuve más calmada, tratando de participar y entregando mis tareas pendientes de mi semana de suspensión. Pero por supuesto, el se había quedado con mi lugar en todas las clases que tomábamos en el mismo grupo, así que no fue hasta el almuerzo que pude platicar con mis amigas.
Estábamos formadas para tomar nuestra bandeja, mientras ellas me contaban sobre los chismes que se habían olvidado de ponerme al corriente, todo lo que había sucedido en mi ausencia.
-Nooo, ¿de verdad fue tan tonto como para plantarla?- dije sin creer lo que me contaban acerca de Lizzie Matthews, una de las porristas.
-Si, ahora quién sabe con quién irá al baile-dijo Erin, que estaba detrás de mí
Cuando me tocó escoger mi comida ya no había panqueques, la persona delante de mí se los había terminado
-Suerte para la próxima-dijo Chris mientras salía de la fila y se dirigía a una mesa, nuestra mesa
-¿Y desde cuando dejan que se siente en Nuestra mesa?
-Carly no queremos discutir con él, es inmune, no queremos una suspensión como la tuya.
-Pero que rayos, y ahora donde nos sentamos?
-Jason nos hizo un lugar en su mesa-dijo Erin, Jason era su novio, o bueno algo así, pero nunca se la pasaban juntos en la escuela, no hasta ahora.
Así que el resto de la semana nos sentamos con el equipo de fútbol.
Sentía las miradas de todos sobre mí, hasta trataba de pasar desapercibida, escondiéndome detrás de mi carpeta.
-Ay cálmate exagerada, nadie te esta viendo-dijo Jo
-Es cierto Carly, nadie te ve, por favor deja de taparte que si no entonces si te verán extraño.
Seguí su consejo confiando en que decían la verdad y seguí caminando, llegué a mi casillero
-Bueno hay algo que debemos decirte-dijo Erin mirando a Jo.
-Ah no, a mi no me metas, yo no tengo nada que ver.
-¿Qué pasa?
-Es que verás… tu chico cretino… comparte algunas de nuestra clases.
-¿Qué?-pregunte estupefacta- ¿qué clases?
-Bueno, sólo las que no compartimos con Jo.
-Pero con ella solo compartimos tres… ay no… no puede ser
-Lo lamento, tendrás que soportarlo en las cuatro que restan, empezando con esta.
Matemáticas, si en sí era una pesadilla, me preparaba para lo peor.
Entré en el salón, con los libros en la mano, me dirigí a mi lugar, pero alguien ya estaba sentado ahí.
-Disculpa?... ese es MI lugar-dije tratando de poner voz autoritaria
-No veo tu nombre en ninguna parte-contestó
-Por favor, solo quiero sentarme
-Pues busca un nuevo lugar
-Me he sentado aquí desde que empezó el ciclo, tu eres él que acaba de llegar
-Cierto, tan cierto cómo que tú no estabas y yo me he sentado aquí toda la semana pasada- no pude evitar mirar a Erin con enojo, ¿cómo había permitido esto?- yo no tengo la culpa de que te hayan despedido, tal vez si fueras menos grosera
-Grosera tu….
-Señorita Ainsworth, hay algún problema?- preguntó la Profesora Foss recién entrando al aula.
-Es sólo que ya no tengo asiento
-Eso no es problema, aquí hay uno al frente
Arrastré los pies por el pasillo, con las mandíbulas apretadas y me dejé caer tan fuerte que casi me hago daño.
Ni siquiera pude poner atención en la clase, estaba molesta. Pero decidí que Chris Stevens no me iba a arruinar el día por segunda, no, tercera vez, así que las clases que siguieron estuve más calmada, tratando de participar y entregando mis tareas pendientes de mi semana de suspensión. Pero por supuesto, el se había quedado con mi lugar en todas las clases que tomábamos en el mismo grupo, así que no fue hasta el almuerzo que pude platicar con mis amigas.
Estábamos formadas para tomar nuestra bandeja, mientras ellas me contaban sobre los chismes que se habían olvidado de ponerme al corriente, todo lo que había sucedido en mi ausencia.
-Nooo, ¿de verdad fue tan tonto como para plantarla?- dije sin creer lo que me contaban acerca de Lizzie Matthews, una de las porristas.
-Si, ahora quién sabe con quién irá al baile-dijo Erin, que estaba detrás de mí
Cuando me tocó escoger mi comida ya no había panqueques, la persona delante de mí se los había terminado
-Suerte para la próxima-dijo Chris mientras salía de la fila y se dirigía a una mesa, nuestra mesa
-¿Y desde cuando dejan que se siente en Nuestra mesa?
-Carly no queremos discutir con él, es inmune, no queremos una suspensión como la tuya.
-Pero que rayos, y ahora donde nos sentamos?
-Jason nos hizo un lugar en su mesa-dijo Erin, Jason era su novio, o bueno algo así, pero nunca se la pasaban juntos en la escuela, no hasta ahora.
Así que el resto de la semana nos sentamos con el equipo de fútbol.
2 comments:
Como es posible que nadie haya comentado aqui???
La historia es genial!!! Simplemente cada vez soy más fan tuya Marianita!!
De verdad amo esta historia, ahora ire a leer la otra parte q me falta desde que no tenia conexión!!
Siii... ya me estaba preocupando jeje... que bueno que te guste... ^^
Post a Comment