El día de hoy tengo para ustedes algo de dos de mis autores favoritos.
Primer les tengo un poema de Pablo Neruda, titulado, Me gustas cuando callas
Me gustas cuando callas porque estás como ausente,
y me oyes desde lejos, y mi voz no te toca.
Parece que los ojos se te hubieran volado
y parece que un beso te cerrara la boca.
Como todas las cosas están llenas de mi alma
emerges de las cosas, llena del alma mía.
Mariposa de sueño, te pareces a mi alma,
y te pareces a la palabra melancolía.
Me gustas cuando callas y estás como distante.
Y estás como quejándote, mariposa en arrullo.
Y me oyes desde lejos, y mi voz no te alcanza:
déjame que me calle con el silencio tuyo.
Déjame que te hable también con tu silencio
claro como una lámpara, simple como un anillo.
Eres como la noche, callada y constelada.
Tu silencio es de estrella, tan lejano y sencillo.
Me gustas cuando callas porque estás como ausente.
Distante y dolorosa como si hubieras muerto.
Una palabra entonces, una sonrisa bastan.
Y estoy alegre, alegre de que no sea cierto.
Y ahora, un fragmento del libro A Orillas del Río Piedra me senté y lloré, de Paulo Coelho, es uno de mis fragmentos favoritos y creo que me sienta bien en este momento.
Primer les tengo un poema de Pablo Neruda, titulado, Me gustas cuando callas
Me gustas cuando callas porque estás como ausente,
y me oyes desde lejos, y mi voz no te toca.
Parece que los ojos se te hubieran volado
y parece que un beso te cerrara la boca.
Como todas las cosas están llenas de mi alma
emerges de las cosas, llena del alma mía.
Mariposa de sueño, te pareces a mi alma,
y te pareces a la palabra melancolía.
Me gustas cuando callas y estás como distante.
Y estás como quejándote, mariposa en arrullo.
Y me oyes desde lejos, y mi voz no te alcanza:
déjame que me calle con el silencio tuyo.
Déjame que te hable también con tu silencio
claro como una lámpara, simple como un anillo.
Eres como la noche, callada y constelada.
Tu silencio es de estrella, tan lejano y sencillo.
Me gustas cuando callas porque estás como ausente.
Distante y dolorosa como si hubieras muerto.
Una palabra entonces, una sonrisa bastan.
Y estoy alegre, alegre de que no sea cierto.
Y ahora, un fragmento del libro A Orillas del Río Piedra me senté y lloré, de Paulo Coelho, es uno de mis fragmentos favoritos y creo que me sienta bien en este momento.
Si el dolor tiene que venir, que venga rápido, dije.
Porque me queda una vida por delante y necesito usarla de la mejor manera posible.
Si él tiene que escoger, que lo haga pronto. En ese caso lo espero.
Si no, lo olvido.
Esperar duele. Olvidar duele. Pero el peor de los sufrimientos es no saber que decisión tomar.
Espero que los disfruten y que tengan buen fin de semana =).
Porque me queda una vida por delante y necesito usarla de la mejor manera posible.
Si él tiene que escoger, que lo haga pronto. En ese caso lo espero.
Si no, lo olvido.
Esperar duele. Olvidar duele. Pero el peor de los sufrimientos es no saber que decisión tomar.
Espero que los disfruten y que tengan buen fin de semana =).
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